David Céspedes con el sueño olímpico a sus espaldas
octubre 27, 2020[et_pb_section fb_built=»1″ _builder_version=»4.6.6″ _module_preset=»default»][et_pb_row _builder_version=»4.6.6″ _module_preset=»default»][et_pb_column type=»4_4″ _builder_version=»4.6.6″ _module_preset=»default»][et_pb_text _builder_version=»4.6.6″ _module_preset=»default»]
El regreso más esperado de la Liga Risaraldense de Natación, es justamente el del deportista de 26 años. Se espera que tenga un 2021 alentador.
David Céspedes Echeverri ha invertido 23 años de su vida al agua. Su condición de hiperactividad desde niño lo llevó a probar diferentes deportes y fue en la natación que se encontró a sí mismo.
Estados de relajación que no solo lo llevaron a explorar sus cualidades, sino a perfeccionar sus habilidades. “Fue el deporte que más me tranquilizó y me llevó a tomar calma”, apunta.
Este administrador de empresas, es un enamorado del deporte y a través de él ha conquistado el corazón de su familia, amigos y conocidos que identifican que es uno de los mejores deportistas que tiene esta práctica en Colombia. Y cómo no serlo, si en cada brazada lo entrega todo.
En el retorno a los entrenamientos, solo fue sentir el impulso en su personalidad, el deseo de querer mostrar lo que tiene para ofrecer, no solo como atleta, sino como un risaraldense más.
David Céspedes recién concluyó con su período de sanción por supuesto dopaje, un pasaje oscuro en su vida, que él mismo se ha encargado de colorear, pues hay algo claro. Además de ser un extraordinario deportista, es un fabuloso ser humano.
“Acabo de salir de uno de los retos más duros de mi vida deportiva, que fue lo del dopaje, traté de demostrar lo contrario y de levantar la imagen mía, siempre traté de representar a Risaralda y a Colombia de manera limpia. No lamento que me haya pasado esto, pero sí lo tomó como una gran experiencia para mejorar como deportista y como humano que soy”, sentencia.
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Toda esa energía condensada durante dos años de suspensión la transformó en nuevos aires, llegó a ser monitor de natación y para replantear su camino, ha mejorado su perfil de líder.
Aunque el Grand Prix de Estados Unidos, al que ya estaba inscrito para participar en noviembre, se canceló. El nadador no suelta ese inquietante anhelo de estar compitiendo nuevamente. Se le ve en sus ojos, se le nota en sus palabras, lo expresa a través de sus medios sociales. Es él, es David, una promesa real para el deporte de altos logros en Risaralda en los próximos años.
Dicen que los grandes deportistas no se hacen solos, son producto de las circunstancias y de quienes los rodean. Esa es una buena manera de describir el presente de Céspedes. La Liga Risaraldense de Natación ha sido su casa. David Arias, Juan Pablo Botero, Samir Franco, Sebastián Berrío, Jacobo Forero, Franklin Grisales, Laura Rengifo, Salomé Vélez, Natalia Martínez y otros tantos que, como compañeros, se permiten crear una atmosfera de superación día a día. ¡Están los mejores con los mejores! ¡Se exigen entre sí, se hacen grandes entre ellos!
El deportista que se gozó el ciclo olímpico 2013-2016, el atleta que lució con honores el uniforme verdiblanco de Risaralda en diferentes podios, está cerca de volver y no hay nada más expectante que ver regresar a alguien que se ha guardado durante un buen tiempo.
Será con la complicidad de su entrenador Carlos Triana, que ingrese una vez más al agua, a hacer eso que tanta tranquilidad le entrega, a realizar la actividad donde se encuentra a sí mismo.
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