El fútbol, impactado por las protestas en Colombia
mayo 4, 2021La confusión y el desasosiego que vive el territorio colombiano y en especial el Eje Cafetero en estos días liderados por la desobediencia civil y la vulneración de la libertad de expresión, ha determinado que los eventos internacionales en esta región del país no tengan cabida, al menos por esta semana.
Esto, luego de la determinación por parte de las administraciones locales tras las reuniones con la Comisión de Seguridad, dirigentes de los clubes en cuestión e integrantes de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL), para cambiar la sede de los encuentros por Copa Libertadores y Copa Sudamericana a realizarse este miércoles 5 y jueves 6 de abril.
Los equipos como Atlético Nacional, La Equidad y Santa Fe, venían disputando sus partido de local en el estadio Centenario de Armenia y el Hernán Ramírez Villegas de Pereira por diferentes razones: Algunos escenarios están recibiendo algunas remodelaciones para Copa América y en la capital, el Nemesio Camacho ‘El Campin’ no fue prestado por alta ocupación de las UCI en Bogotá.
Al tener la posibilidad de albergar competencias de gran importancia a nivel continental, le permite a las ciudades sede obtener visibilidad, ingresos económicos y ser reconocidos por tener buena infraestructura que avala el desarrollo de certámenes como ya ocurrió en el año 2020 con el Torneo Preolímpico.
Sin embargo, algunas autoridades intentaron por todos los medios, que la Conmebol y los equipos extranjeros tuvieran garantías, la generación de confianza en situaciones de orden público tan tensas, debilitó el propósito de continuar con las citas internacionales.
El Covid-19 y la corrupción, los dos virus que han desencadenado profundos vacíos dentro de una sociedad que ya cansada y abandonada decidió expresar su descontento logrando hacer temblar las bases de un gobierno que andaba levitando en su burbuja de conformismo y que ahora se encuentra alerta ante el despertar de un león dormido.
Ahora, si esto se llegase a prolongar también queda en duda la realización de la Copa América en el mes de junio, haciéndonos acordar de aquel torneo en el 2001 que Colombia organizó cuando pasaba por un conflicto de índole bélico interno en un lucha gubernamental con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que había puesto en entredicho la realización del evento.
¿En qué terminará esto?
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