El café y su gran amistad con el ajedrez en el Quindío

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Quién dijo que el Paisaje Cultural Cafetero no tiene ninguna relación con el deporte, por el contrario, es arraigo, identidad y sentido de pertenencia para los deportistas de esta tierra colombiana.

En el Quindío tienen las pilas puestas por el ajedrez, el deporte ciencia que sigue ganando adeptos en el Eje Cafetero. El proyecto Café-Ajedrez invita a los niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos de este departamento a acercarse a esta bella práctica que mejora la capacidad de análisis, la creatividad y la memoria.

“Tenemos una tradición de ocho años promoviendo el ajedrez, porque lo hacemos con un enfoque histórico de esa relación que ha existido siempre entre el café y el ajedrez. En muchos sitios donde se vende café en Europa se puede encontrar una tabla de ajedrez. Aquí en Armenia hace mucho tiempo también existió y queremos revivir esa tradición”, expresó Jorge Orrego Gaviria, profesor de ajedrez y promotor de la apuesta.

Un buen jugador de ajedrez es amante del café, porque el café es un buen compañero dicen los que están inmersos en este mundo, y bajo ese concepto surgió el proyecto que hoy quiere devolver la vida a los peones, la reina y el alfil entre la población.

Café-Ajedrez en un sueño ambulante que camina por diferentes sitios de venta del grano en Armenia y sus alrededores, apuntando a masificar a través de la enseñanza. Y aunque su fuerte lo tienen en el corregimiento de El Caimo, en Armenia, se busca llegar cada vez a más niños en diferentes lugares.

“A donde nos inviten vamos, estamos prestos a continuar esa tradición de hacer del café un gran amigo del ajedrez”, añadió Orrego agregando que a mediano plazo quieren potenciar más el núcleo del proyecto.

Justo en este tiempo que la región tiene importantes representantes entre jugadores y dirigentes, actividades como las de El Caimo, fortalecen los procesos de aprendizajes, que en su esencia están encaminados a los niños, pero también inciden en los adultos.

“Hace aproximadamente un año yo me di cuenta de la iniciativa de este club ajedrecístico, y a mi hijo más o menos desde los tres años le noté habilidades en el ajedrez y me acerqué al profesor para iniciar este proceso”, complementó Angélica María Aguirre Díaz, madre de un niño deportista.

Las clases que son gratuitas, llegan a beneficiar a cerca de 30 personas entre niños, niñas, jóvenes y adultos, todos del Quindío.

Las personas que estén interesadas en aprender a jugar ajedrez, se pueden comunicar a través de Facebook a Café-Ajedrez.

*Información del canal aliado – Survisión Noticias*

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